Desde ese momento la popularidad de esta compañía aumentó notablemente.
Alexa es un dispositivo que se encuentra constantemente escuchando, únicamente comienza a rastrear y analizar lo que el usuario dice después de escuchar la palabra “Alexa”. El funcionamiento de Alexa es muy parecido al de otros asistentes como Google Assistant, Siri y Cortana.
A Alexa se le puede hacer muchos tipos de pregunta, como configurar alarmas, preguntar qué día es, establecer recordatorios, iniciar cronómetros o hacer compras mediante Amazon e informarte sobre el estado de los envíos.
Al hacer preguntas podréis comprobar una y otra vez que el asistente de voz de Amazon no sólo responde, sino que también actúa sobre los instrumentos de domótica que tenga en su casa y que estén conectados con Alexa. Otros, aunque no sean de domótica, no necesitarán más que estar en un enchufe inteligente para que con Alexa los pueda apagar… incluso desde la calle.
Los usuarios pueden extender las habilidades de Alexa instalando "skills" desde la aplicación del dispositivo.
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